Laboratorio de Electrofisiología

Nuestro Laboratorio de Electrofisiología se dedica al estudio de las arritmias complejas, su curación mediante procedimientos tales como la Ablación con Radiofrecuencia, o su control con fármacos específicos llamados antiarrítmicos o con dispositivos como los Marcapasos, Resincronizadores y Desfribiladores Automáticos Implantables (DAI). El Laboratorio está dirigido por el Dr. Antonio Hernández Madrid.
Electrofisiología

Estimulación cardíaca, marcapasos, desfibriladores y resincronizadores

La Unidad de Arritmias y Marcapasos de nuestro hospital realiza implantes de estimulación cardiaca. Realizamos todo tipo de implantes, desde marcapasos unicameral, bicameral, resincronizadores, desfibriladores y en general todos los tipos de dispositivos de estimulación cardiaca o relacionados con las arritmias cardiacas.
Asimismo nuestra Unidad realiza seguimientos de todos los dispositivos de estimulación cardiaca (marcapasos, desfibriladores, resincronizadores), teniendo también monitorización remota de los mismos via internet en los modelos que lo tienen disponible.
En nuestro Hospital se sigue el procedimiento de protocolo/proceso/via clínica de indicación, implante, asistencia a complicaciones y seguimiento de las guías clínicas Europeas.
Existe un personal experto en los implantes de dispositivos, el personal descrito previamente de la Unidad de Arritmias y Marcapasos y un personal de Enfermería adecuadamente entrenada/o durante el implante.
Existen todos los consentimientos informados necesarios (dispositivos) de acuerdo a las normas vigentes y por supuesto este se obtiene y se deja una copia en la historia en el 100% de los pacientes.

Estudios electrofisiológicos y ablación con cateter de arritmias

En general se describe una taquiarritmia cuando la frecuencia cardiaca es mayor a 100 latidos por minuto (lpm) en al menos tres latidos consecutivos. Las taquiarritmias pueden presentarse a cualquier edad y son causa de una importante morbilidad dentro de la población general. El reconocimiento, identificación y diferenciación de los distintos mecanismos es de gran importancia. En Urgencias es imprescindible hacer una valoración de la tolerancia hemodinámica explorando el nivel de conciencia, signos de mala perfusión periférica (palidez, frialdad distal, sudoración), a la vez que procedemos a la monitorización electrocardiográfica, medición de presión arterial, saturación de oxígeno y canalización de un acceso venoso. Debemos interrogar sobre los síntomas acompañantes como síncope y presíncope, angina, disnea, palpitaciones o mareos, así como la forma de presentación de la arritmia (si se instauró en forma lenta o súbita).
Es fundamental realizar un electrocardiograma (ECG) de 12 derivaciones, y de ser posible, compararlo con uno previo, identificando si se trata de una taquicardia ventricular o supraventricular, ya que su diferenciación es importante de cara al tratamiento y pronóstico. Debemos averiguar la existencia de cardiopatía subyacente e historia de arritmias. Evaluar la fracción de eyección, signos de insuficiencia cardiaca, la presencia de factores de riesgo cardiovascular, enfermedades concomitantes (renales, endocrinas, metabólicas, alteraciones electrolíticas, enfermedad pulmonar obstructiva crónica), la toma de fármacos con potencial arritmógeno y/o antiarrítmicos; la presencia de situaciones favorecedoras de arritmias como intoxicaciones, abuso de drogas, fiebre, hipoxia y ansiedad. Antes de hacer un tratamiento dirigido a la arritmia, nos debemos plantear si esta es la responsable de la situación del paciente o si por el contrario, es secundaria a una enfermedad de base.

Taquiarritmias supraventriculares

Las taquiarritmias supraventriculares se definen como aquellas arritmias que se originan en el tejido supraventricular o que necesitan de este como parte de un circuito reentrante. Dentro de ellas distinguimos: taquicardiasauriculares, taquicardias por reentrada intranodal y taquicardias por reentrada aurículoventriculares a través de una vía accesoria.

Ejemplo de ECG de un paciente con taquicardia supraventricular con complejo QRS estrecho, se trata de una taquicardia intranodal.
Las taquicardias auriculares son todas aquellas taquicardias originadas en las aurículas, que no precisan para su mantenimiento de estructuras ventriculares ni de la unión auriculo-ventricular (AV). Dentro de ellas, distinguimos el flutter o aleteo auricular, taquicardias auriculares focales y fibrilación auricular. El flutter auricular es la taquicardia macrorreentrante más importante, luego tenemos las taquicardias auriculares focales, donde la activación auricular comienza en una pequeña área o “foco”, desde donde se propaga al resto de las aurículas.
Ejemplo de ECG de un paciente con flutter auricular típico
La fibrilación auricular se caracteriza por una activación irregular, rápida y no coordinada de las aurículas con pérdida de la eficacia mecánica de las mismas, que se traduce en el ECG por la ausencia de ondas P, siendo sustituidas por oscilaciones irregulares de la línea isoeléctrica, seguidas de QRS arrítmicos.
La taquicardia por reentrada intranodal es la taquicardia de complejo QRS estrecho y regular más común. Se produce por una reentrada del impulso dentro del nodo AV, provocan palpitaciones rápidas de comienzo y final súbitos que se abortan con maniobras vagales.
Las taquicardias por reentrada AV a través de una vía accesoria es provocada por una conducción del estímulo hacia los ventrículos a través de vías atrioventriculares accesorias, que pueden tener conducción exclusivamente retrógrada (vías oculta) o anterógrada, dando lugar a la preexcitación característica del síndrome de Wolf-Parkinson-White (WPW). La clínica es similar a las taquicardias intranodales.

Taquiarritmias ventriculares

Se consideran taquiarritmias ventriculares aquellas que se originan en un punto distal a la bifurcación del haz de His, en el tejido especializado de conducción, en el músculo ventricular o en ambos tejidos.  De forma general, existen distintos tipos de taquiarritmias ventriculares: el ritmo idioventricular acelerado o taquicardia ventricular lenta (cuando la frecuencia ventricular es inferior a 100 lpm), las taquicardias ventriculares sostenidas, el flutter ventricular y fibrilación ventricular.

Ejemplo de una taquicardia ventricular monomorfa sostenida, en este caso con morfología de bloqueo de rama derecha y hemibloqueo anterior, la clásica del fascículo posterior izquierdo.
El flutter y la fibrilación ventricular es la contracción rápida, desorganizada y asincrónica del musculo ventricular. Electrocardiográficamente se caracterizan por la ausencia de complejos QRS definidos. En la mayoría de los casos aparece en pacientes con cardiopatía estructural, aunque puede aparecer en pacientes sin enfermedad cardiaca demostrable a pesar de exámenes diagnósticos exhaustivos. Si no se interrumpe precozmente conduce a la muerte cardiaca súbita.